ENTERATE...
Si no todos tenemos los mismos gustos, ¿qué hace que la música sea tan universal?
Científicos en Estados Unidos podrían tener la
respuesta: una parte de nuestro cerebro responde igual cuando escuchamos
por primera vez una tonada.
Los especialistas del estudio, publicado en el European Journal of Neuroscience,
utilizaron la resonancia magnética para medir la actividad cerebral de
17 adultos mientras escuchaban por primera vez 9,5 minutos de una pieza
clásica del período barroco.
El resultado fue que varias regiones "altamente peculiares" estaban sincronizadas entre los sujetos.
"Y las zonas que responden (igual) son muy
interesantes", le dijo a BBC Mundo Vinod Menon, uno de los autores del
trabajo de la Universidad de Stanford.
"No sólo hay un patrón consistente, sino también
encontramos patrones en distintos niveles de procesamiento de la
información", agregó.
Movimiento sin moverse
El especialista explicó que a pesar de las
diferencias de cada individuo, si escuchan una pieza que no han
escuchado antes, las zonas del cerebro que tienen que ver con el
procesamiento, así como con la motricidad, la planificación, la memoria y
la atención responden de forma similar.
"La parte del movimiento es muy interesante porque los participantes estaban acostados en un escáner. No podían mover
el cuerpo, y a pesar de eso, pudimos apreciar cómo el área relacionada a
la parte motriz se sincronizaba entre los individuos", explicó Menon.
"Así que nuestro cuerpo responde naturalmente a
estimulaciones musicales estableciendo movimientos que típicamente
acompañan a la música", agregó."Esto es emocionante porque nos muestra
que mientras escuchar la música es -en muchos sentidos- una experiencia
altamente individualista, los cerebros de diferentes personas están
conectados para seguir esta música de manera consistente a través de
varias áreas del cerebro".
Los investigadores consideran que el motivo de
que esto ocurra puede estar en los orígenes de la evolución, en la forma
en que el cerebro está cableado.
"Desde sus orígenes la música ha sido usada en
un contexto social que involucra el canto y el baile", señaló el
científico. "Por lo tanto el movimiento tiene un aspecto social".
Terapias del lenguaje
El experto señaló que el resultado de su estudio
podría tener aplicaciones en el área del lenguaje y procesamiento del
habla. Por ejemplo, en técnicas de comunicación con personas autistas.
No obstante, Menon aclara que habría que
realizar más estudios para establecer si el cerebro de una persona con
esta condición responde igual que la de adulto típico desarrollado.
Son varios los estudios que se están realizando para entender cómo el cerebro responde a la música.
El trabajo de la Universidad de Stanford
coincide con el realizado con expertos canadienses sobre la sensación de
gratificación que siente la gente cuando escucha una tonada.
Con la ayuda de imágenes por resonancia
magnética, el equipo de Canadá descubrió que la zona del cerebro de
recompensa se activa cuando la persona escucha por primera vez una
melodía.
En la medida en que el oyente disfrutaba más de
la música, más fuertes eran las conexiones en la región del cerebro
conocida como núcleo accumbens.
Al respecto, Vinod Menon aclaró que a diferencia
de las similitudes encontradas en áreas del cerebro relacionadas con
procesamientos complejos de la información, en su estudio no encontraron
entre los participantes patrones similares en el procesamiento de la
gratificación
No hay comentarios:
Publicar un comentario