A MI MANERA. ISABEL PANTOJA

domingo, 19 de abril de 2009

CRONICA

CASO MACABRO
Por Rafael Bueno Ramírez

DIRECTOR DE LA REVISTA BIMESTRAL
"COLOR DEL ALMA DEL AFRODESENDIENTE CUBANO"
DE LA PROVINCIA DE PINAR DEL RIO -CUBA



Virgilio había jurado no haberlo visto en las fantásticas películas de del cineasta norteamericano Steve Spelverl, ni haberlo leído en las famosas novelas de Agatha Cristie. Tampoco Julio uno de mis mejores amigos desde la adolescencia y uno de los lectores más voraces que he conocido en mi vida.

El tampoco lo había leído en sus cientos de libros que ha devorado. Solo viéndolo como lo pudo apreciar este comunicador y viviendo en Cuba pudiera creerse posible.

Negro y Canelo se llamaban los perros que habitaban en la escuela de economía Rigoberto Fuentes en el centro de la ciudad pinareña.

Ellos son los protagonistas del horrendo hecho de aquella noche del mes de Agosto de 2001.

Muy cerca de la escuela está ubicado el hospital provincial Clínico Quirúrgico Docente Doctor León Cuervo Rubio. Solo una cerca dividía el centro educacional del recinto hospitalario.

Lo que más anhelaba en aquel momento era una cámara fotográfica para recoger en gráficos lo que muy pocos ojos podrían ver. Estaba completamente seguro que la foto prontamente recorrería el mundo.

El pasillo que era largo y silencioso Berenice lo conocía de memoria. Lo podía caminar con los ojos cerrados.
¡Cuantas veces de la escuela habrá acariciado su cuerpo su sombra aquellos contornos infinitos! Precisamente en esa escuela donde ha trabajado por más de 20 años como administradora de la cafetería.

En su oficina almacén, las cucarachas y las ratas comen a diario sus provechosas comidas a veces nutridas, otras con menús exquisitos consistentes en panes, dulces y resíduos que encuentran en el piso.
Estos comestibles provienen del almacén central de la Empresa de Comercio y Gastronomía de Pinar del Río.

Luego aunque haya sido manociada por cucarachas, ratas y otros roedores de todos modos serían vendidos en la cafetería de la escuela. Pero el día del hecho no era un día cualquiera.

Era el mes de Agosto, en plenas vacaciones.La escuela de economía servia como villa para el alojamiento de los artistas, incluyendo gastronómicos y personal de municipios al servicio del carnaval.
Era el sábado 16 de Agosto del ano 2001. Berenice preparaba las condiciones.

En pocas horas llegaría el personal, habría que repartirle la merienda correspondiente y luego habilitarle el alojamiento. Minutos más tarde llegarían Canelo y Negro los perros que habitaban en la escuela de economía que merodeaban a diario por los alrededores de la cocina.
Gumersindo fue el primero que lo vio. Quedó estupefacto cuando sus ojos miraron lo que aun viéndolo resultaba increíble, no lo podía creerlo. Canelo uno de los perros se apareció con una pierna humana amputada comiéndose a todo sabor la carne de la misma.

Canelo habría entrado al crematorio del hospital cogiendo la parte humana que más convino a su gusto para su posterior banquete. Minutos más tarde llegaría Negro, el otro el otro perro. Pero no venia solo. Vendría con un gato.

Por cierto, de unas 6 o 7 libras de peso, Seguramente enviciado desde mucho tiempo a los resíduos mortales humanos.

Negro apareció con un brazo completo de un ser humano. Por la estructura y color parecía de una persona de la raza negra. Evidentemente de una mujer. Ya se había comido los dedos índice y pulgar. Era la mano derecha de la occisa.

El gato, que se ubicaba en tercer plano. Con hambre desesperante y con hocico sangrante y maloliente municiosamente devoraba a todo sabor una lengua humana bicolor entre roja marrón y negra con una fetidez inaguantable.

Berenice que hacía poco había comido prontamente vomitó la comida hasta el último grano. Mientrás un grupo de 10 personas que en el preciso momento llegaron pudieron ser los más fieles testigos del increíble y macabro hecho.

El crematorio del hospital provincial León Cuervo Rubio cremaba los días Martes y Juevés. En aquel entonces debido a la escasez total de combustible y otros problemas que en ese entonces no justificaban los hechos.

No era posible que se cremara en dos ocasiones a la semana. Resultó que los perros y gatos cruzaban la cerca divisoria entre la escuela de economía Rigoberto
Fuentes y el hospital provincial León Cuervo Rubio.

Luego fácilmente entraban al crematorio y se abastecían fácilmente de vísceras y carne humana,incluyendo brazos y piernas amputadas.

Luego dichos animales en altas horas de la noche preferían el sótano de la escuela para comer cómodamente la carne sustraída.

En 1997. O sea tres cursos atrás un alumno que estudiaba contabilidad en aquel entonces aseguro una tarde encontrarse en el organoponico de la escuela un dedo humano con una larga una. Nadie s e lo pudo creer. Gumersindo el administrador de la escuela aseguro un lustro después que el egresado alumno nunca mintió.

Casos y cosas como este horrible hecho sucede en Cuba, en la Cuba de hoy,
en la Cuba triste de los cubanos.

En el que el gobierno clásico comunista asegura, como una potencia médica mundial y mejor del mundo.
¿Sucederían estos hechos en los Hospitales CIMEX, En la Clínica 43 de Fidel Castro, o en otras clínicas y hospitales militareshabilitados para la alta cúpula del oficialismo?

-‘’Algunas de estas partes humanas que se comían estos perros pudo haber sido el cuerpo de cualquiera de cualquiera de nuestros seres queridos’’- comentó Berenice con el rostro ajado frunciendo y el ceño con un gesto involuntario.

Este triste ejemplo que se pudiera resumir con muchos términos nada loables nos da la referencia que después de 50 años el gobierno de Castro Comunista no ha logrado resolver los problemas básicos-elementales en el sector de la salud publica, sin tocar la economía, la política de gobierno, y mucho menos el tema que más se identifica con el pueblo cubano’’Los Derechos Humanos’’

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